Hernán Cristante destacó lo difícil que ha sido para el plantel de Gallos de Querétaro sobreponerse emocionalmente a lo vivido el sábado en el estadio Corregidora.
El otrora guardameta señaló que hay jugadores que no han podido dormir después de ser testigos de los hechos de violencia y aseguró que lo que hace más difícil la situación son las amenazas de muerte que han recibido.
El temor de la desafiliación no se asemeja siquiera al temor de que estén amenazando de muerte a tu familia. ¿Perder el trabajo? Puedes trabajar de cualquier cosa, pero la sensación de que amenacen a tu gente es muy desagradable», destacó.
Cristante aseguró que la situación es tan delicada, que las familias de algunos jugadores se quieren ir de Querétaro.
Las mujeres de algunos de los jugadores están pensando en irse, están sufriendo esta situación, apuntó.
El técnico argentino señaló que antes de que se anuncien las sanciones, se debe analizar a conciencia toda la situación y cada uno de los elementos.
Hay muchas cosas que la gente que tome esta decisión tiene que atender. Esto afectó a la familia del futbol mexicano y trascendió a niveles que no tenía que haber trascendido», puntualizó.
