A sus 21 años, Kiril Tereshin, pidió a Dios su muerte debido al intenso dolor que siente en sus enormes bíceps, los cuales desarrolló tras inyectarse aceite synthol en los brazos.
El también conocido El Hulk ruso reportó hace unos días en su cuenta de Instagram los problemas que ha padecido como hinchazón e incluso el sufrimiento de su madre por verlo en mal estado.
«Ya es el fin, pido a Dios que el alma salga de mi cuerpo, no puedo aguantar el dolor, publicó en su cuenta de la red social de Rusia VKontake.
Debido a las inyecciones de aceite synthol en los bíceps, Tereshin ha logrado hacerlos crecer hasta alcanzar un tamaño de cerca de 60 centímetros, de acuerdo con una imagen que publicó hace unos días.
En otra publicación en Instagram, el joven ruso detalló que había estado recostado durante dos días en su cama debido a los dolores y que, incluso, apenas pudo pararse a trabajar sobre sus hombros.
Algunos interpretaron trabajar con las inyecciones que El Hulk ruso se aplica desde que dejó el ejército y se inició al culturismo y las cuales pueden causar distintos daños al cuerpo como embolias pulmonares y derrames cerebrales.
vía Excélsior