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Ciudad de México.- Mientras el país se aproxima a los 90 mil decesos acumulados a causa del COVID_19, funcionarios de la Secretaría de Salud expresaron que suman fuerzas con el gobierno de Chihuahua, para controlar la incidencia de la enfermedad que obligó a retornar al semáforo epidemiológico rojo.
901 mil 268 casos y 89 mil 814 decesos por la pandemia, confirmó José Luis Alomía Zegarra, director de Epidemiología, en la conferencia vespertina del martes, en la cual detalló junto con el director del IMSS, Zoé Robledo, parte de la labor que están haciendo en Chihuahua.
Lo que está viviendo Chihuahua y algunos de los estados vecinos es una situación que ya hemos pasado en otras entidades.
Chihuahua había mantenido un nivel de contagios, razonablemente baja comparada con otras regiones del país.
Vamos a expandir la capacidad de respuesta y en razón del semáforo rojo, lograremos reducir la epidemia, expresó por su parte, Hugo López-Gatell, en su intervención.
VIAJES EN AVIÓN
En otro tema y preguntado sobre los traslados en avión y el riesgo de contagio que ello implica, López-Gatell reiteró que el cubrebocas es una barrera física para evitar que salgan las gotas de la nariz y boca, de una persona que esté enferma; sin embargo, no es una barrera para protegerme a mí mismo.
Generalmente pensamos de manera más egoísta y se le ocurre que con el cubrebocas está protegido. No. Al interior de una aeronave no es factible guardar condiciones de sana distancia.
Por lo tanto. Precisamente las aeronaves y los autobuses, son un ejemplo del uso del cubrebocas, porque no es factible tener la sana distancia, detalló el funcionario.
Aclaró que en las areonaves hay un recambio del aire con frecuencia, lo cual reduce la probabilidad de contagio.
Hay estudios que se han hecho de otras enfermedades y se encuentra que el riesgo de contagio al interior de una aeronave es menor a lo que uno podría suponer.
Ahora bien, durante el abordaje y descenso es importante mantener las otras medidas como la sana distancia.
