El primero de tres debates presidenciales se lleva a cabo en la capital mexicana. La tensión ha sido mucha para llegar hasta aquí. Se trata del proceso electoral más grande y más costoso de la historia del país y, según los analistas, uno que redefinirá el rumbo para la República.
En el cierre del primer debate, Meade Kuribreña reiteró su honestidad y preparación, y planteó que cree en que México podrá convertirse en una potencia.
AMLO cerró el primer debate presidencial afirmando que México está viviendo un momento estelar, y se va a lograr el cambio de manera pacífica. El Gobierno dejará de estar a la orden de una minoría rapaz. Quiero seguir, añadió, el ejemplo de Juárez, Madero y Cárdenas. ¡Viva México!, concluyó.
Anaya usó sus última intervención para atacar a López Obrador. Es una farsa tu historia, le dijo al morenista. Apeló en su despedida para decir que su coalición es la única que le puede ganar a López Obrador. Te invito a que lo hagamos juntos.
El Bronco destacó que los partidos políticos le han fallado a los mexicanos y son el verdadero cáncer del país. Si el Presidente de México se entera de todos los temas, y vamos a correr a los partidos, los vamos a jubilar sin pensión, dijo.
Margarita pidió a los ciudadanos no conformarse con cualquier candidatos, y que decidan por sus sueños y no por sus miedos. Yo, afirmó, amó profundamente a México y sé que con tu voto y tu confianza voy a ser la primera Presidenta.
En el primer tramo del debate presidencial, los cinco candidatos presidenciales se tocaron fuerte. A Andrés Manuel López Obrador lo atacaron los cuatro por la amnistía a criminales y por su desempeño en la capital; a Margarita Zavala, por el fracaso del Gobierno de su esposo, Felipe Calderón; a Ricardo Anaya, por haber defendido antes a esos gobiernos que ahora cuestiona y por las dudas que hay sobre su patrimonio. A José Antonio Meade le cargaron la mano por representar a un partido señalado por corrupción: el PRI. Jaime Rodríguez El Bronco fue una especie de comodín.
Vía SinEmbargo.mx