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El miércoles salió la primera caravana migratoria desde Honduras, una vez que Guatemala abrió sus fronteras, cerradas a causa de la pandemia del COVID_19 que comenzó en febrero.
Medios reportan que la noche del 30 de septiembre partieron desde San Pedro Sula, cientos de sin papeles, quienes fueron convocados por redes sociales para emprender el viaje el primero de octubre mediante autobuses.
La mayoría de las personas que se reunieron el miércoles decidieron no esperar y partieron en la oscuridad de la noche con mochilas y, muchos, con cubrebocas.
Los grupos se encaminaron rápidamente a lo largo de la carretera, algunos recibiendo la ayuda de conductores, mientras otros continuaron caminando hacia la frontera con Guatemala.
Esta caravana avanza solo dos semanas después de que Guatemala reabriera sus fronteras, tras mantenerlas selladas durante meses para frenar la propagación del coronavirus.
La Embajada de Estados Unidos en Honduras aseguró en su cuenta en Twitter, que la migración a Estados Unidos era más difícil que nunca en este momento y más peligrosa debido al COVID-19.
DEBERÁN CUMPLIR LOS PROTOCOLOS SANITARIOS: MIGRACIÓN
Por su parte, el Instituto Nacional de Migración (INM) aseguró que, por la pandemia existe la instrucción para que todos los que hagan uso de las instalaciones del INM, como las áreas de internación en el país, dígase autoridades civiles, militares y particulares, deberán cumplir con los protocolos de salud para acompañar la lucha contra esta enfermedad.
El Código Penal Federal, en su Artículo 199-Bis, establece que será sancionado de tres días a tres años de prisión y hasta 40 días de multa, quien a sabiendas que está enfermo de un mal grave en período infectante, ponga en peligro de contagio la salud de otro.
En tanto, el artículo 444 del Código Penal del Estado de Chiapas determina hasta cinco años de prisión; mientras, el artículo 120 del Código Penal del Estado de Tabasco fija de dos y hasta 10 años de prisión a que cause a otro un daño de salud.
(Foto: Publímetro)
